En el caso del primer automotor, se trataba de un vehículo particular sin habilitación para prestar el servicio de taxi, y en el segundo caso, fue retenido un taxi con habilitación, pero que estaba siendo conducido por una persona no habilitada por el municipio para desarrollar tal tarea.
La Ordenanza N°4226 dispone que los choferes de taxis deben cumplimentar el trámite de habilitación donde se constatan los requisitos exigidos, cómo licencia profesional de conducir, ausencia de antecedentes penales, etc.