En los últimos días del mes de abril del 2021, un grupo de senadores de la coalición parlamentaria de Juntos por el Cambio envió un pedido a la presidencia del Senado de la provincia de Buenos Aires para que se investigue el rol del defensor del Pueblo, Guido Lorenzino.
El pedido incluyó la creación de una comisión bicameral de Seguimiento de los últimos actos administrativos del defensor del Pueblo. De acuerdo a los legisladores de la oposición, Lorenzino estaría “sujeto” al poder ejecutivo provincial cuando, precisamente, el cometido institucional es la defensa de los intereses de la comunidad.
A pesar de las denuncias y los pedidos de investigación, curiosamente Lorenzino fue reelegido en su cargo el 29 de diciembre de 2021 con el voto mayoritario de la Legislatura. En aquel entonces, el flamante defensor del Pueblo aseguró que se trataba de “la confirmación de nuestro camino para seguir profundizando el trabajo que lleva adelante el organismo a favor de la protección de los derechos de las y los bonaerenses”.
En las últimas horas, el propio Lorenzino lanzó una curiosa licitación que pone la lupa sobre la defensoría del Pueblo bonaerense, por lo anacrónico del pedido. A pesar de la grave crisis política y económica que atraviesa la provincia de Buenos Aires, la solicitud fue concreta: cuatro autos nuevos.
En efecto, de acuerdo al proceso de compra 228-044-LPR22, la defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires gastará un total de 28.895.918 pesos en la compra de cuatro automóviles cero kilómetros, con caja de velocidades automática, tipo sedán y nafteros. En promedio, serán algo más de 7.2 millones de pesos por cada vehículo.
Una vez más, el defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Guido Lorenzino, quedó en el centro de la polémica luego de decidirse a comprar cuatro autos cero kilómetro, cuyos costos saldrán directamente de las arcas públicas. La medida que resta casi 29 millones de pesos al presupuesto provincial sale, justamente, del despacho de quien asegura defender a los bonaerenses.