A lo largo de la pandemia del coronavirus el presidente de ultraderecha de Brasil, Jair Bolsonaro, a realizado diversas y controversiales declaraciones sobre el Covid-19 y su importancia. Ahora, el mandatario de 65 años aseguró que no se inoculará cuando haya una vacuna disponible. «Les digo, no lo haré (vacunarme)», afirmó en un video subido a sus redes sociales este jueves. «Es mi derecho», agregó.
La pandemia del coronavirus ya dejó más de 170.000 muertos en Brasil, según un recuento realizado por AFP en base a cifras oficiales, el segundo país con más decesos en términos absolutos, detrás de Estados Unidos. Jair Bolsonaro enfrenta críticas por su manejo del Covid-19, al cual ha minimizado, en tanto se opone a medidas de confinamiento y promociona la droga hidroxicloroquina pese a que los estudios muestran que es ineficaz contra el virus en cuestión.
El mandatario brasileño se contagió de coronavirus a comienzos de julio. Tras su positivo más de la mitad de su gabinete se infecto, dejando ver el nivel de precaución con el que se manejaron. Una vez que las autoridades de la salud del país aprueben una vacuna, el gobierno «organizará inmediatamente» su compra y distribución para quienes deseen inocularse, indicó en el video.
Pero dijo estar «seguro» de que el Congreso brasileño no hará obligatoria la vacunación. Muchos países se mostraron esperanzados de un pronto fin de la pandemia y su devastador impacto tras anuncios de laboratorios de que sus vacunas tienen un 95% de efectividad. El miércoles, el gigante farmacéutico estadounidense Pfizer comunicó a la agencia reguladora brasileña resultados sobre los ensayos de su vacuna, paso necesario para solicitar su registro.
Brasil, con 212 millones de habitantes, tiene acuerdos bilaterales y también se adhirió al Covax, el mecanismo de la OMS. El gobierno federal firmó con Oxford/AstraZeneca para comprar y producir dosis para vacunar a 65 millones de personas en el primer semestre de 2021 y a otros 65 millones en el segundo. El gobierno de San Pablo firmó otro acuerdo con Coronavac por 45 millones de dosis, pero por rivalidades políticas entre el presidente Jair Bolsonaro y el gobernador Joao Doria la vacuna no ha sido incluida todavía en los planes del Ministerio de Salud.