La obra fue iniciada el 13 de julio de 2020, con un plazo de 300 días corridos y se encuentra en período de prueba, finalizando tareas de control y automatización.
A través de un sistema de “geotubos”, permitirá reducir los volúmenes de lodos residuales que se generan en la potabilización del agua, logrando cumplir con las normativas provinciales de control de vertidos en los parámetros sólidos suspendidos y aluminio.
La separación de la fase sólida de la líquida puede concretarse mediante la utilización de geodesecadores, bolsones confeccionados a partir de geotextiles que poseen alta rigidez y resistencia a la tracción, con una gran capacidad de drenaje. Estas propiedades le confieren un gran desempeño en los procesos de filtrado y desecado de efluentes.
La implementación del nuevo sistema de tratamiento fue aprobado por COIRCO mediante Nota Nº 320/19 y constituye una alternativa eficaz para mitigar impactos medioambientales sin alterar la operación continua de la planta de agua.
Las obras fueron construidas para el módulo inicial de tratamiento (hasta 2.400 m3/h de agua procesada, pudiendo ampliarse a medida que se incorporen nuevos módulos) y comprenden:
- Nueva cañería colectora y empalme al colector principal existente de PRFV f = 1200 mm, aguas debajo de la Planta de Tratamiento de Desagües.
- Tanque de compensación (mezclado) y bombeo de 280 m3, electrobombas sumergibles para aguas residuales y equipo agitador del líquido, incluyendo cámara de ingreso con compuertas de maniobra.
- Cañería de impulsión desde el tanque de compensación al campo de filtración o lecho de secado.
- Lecho de secado, estructura impermeabilizada sobre la cual se coloca la tecnología de filtración tipo Geotube o Geodesecadores.
- Cañería de descarga de los líquidos tratados.
- Cámara final de Mezcla, cámaras de empalme, cañerías e interconexiones.
- Depósito de barros.