El argentino Miguel San Martín, jefe de Ingeniería de la NASA, donde trabaja desde la década de 1980, afirmó hoy que Marte es "el planeta más habitable y adecuado para colonizar", y señaló que si bien "aún desconocemos si hay vida biológica" allí, "sería difícil creer que sólo exista en la Tierra, cuando el Universo es tan grande".
"Está probado que hace unos 4.000 millones de años Marte era un planeta cálido y húmedo con condiciones habitables para la vida, por lo que puede haber surgido. El próximo paso es saber si ocurrió o no y entender cuál fue el cambio climático que hizo desaparecer su atmósfera, que era como la de la Tierra", explicó San Martín a un cronista de la agencia Télam, quien dio una conferencia ayer por la tarde en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA).
"Está probado que hace unos 4.000 millones de años Marte era un planeta cálido y húmedo con condiciones habitables para la vida, por lo que puede haber surgido"
Miguel San Martin
Actualmente trabaja en la misión de enviar otro "astromóvil" a Marte el próximo año, llamada "Mars 2020", cuyo objetivo será "buscar signos de vida pasada, recoger muestras de roca para su posible regreso a la Tierra y probar tecnología para la futura exploración humana".
"La idea es recolectar esas muestras de roca y colocarlas en cartuchos para que traigan respuestas a la Tierra. Para saber si hubo vida o no, es más fácil traer Marte a la Tierra que llevar todos los elementos científicos necesarios al espacio", bromeó San Martín, elegido como miembro de la Academia Nacional de Ingeniería de los Estados Unidos el pasado 7 de febrero.
"El universo es tan grande que es difícil pensar que sólo haya vida en la Tierra..."
Miguel San Martin
"El universo es tan grande que es difícil pensar que sólo haya vida en la Tierra. Aunque por ahora sólo tenemos certezas de que existe vida aquí, el resto son conjeturas", reconoció.
San Martín recordó además las misiones anteriores a Mars 2020, algunas de las cuales fracasaron.
"La primera misión se llamó Viking y fue en 1976. Fue una gran decepción y un gasto enorme de dinero, ya que los experimentos dieron negativo y sólo se descubrió que el planeta rojo tenía una química muy compleja en su superficie que no tenía nada que ver con la vida", relató.
El investigador indicó que luego de ese "fracaso", transcurrieron 20 años para que el proyecto se reactive.
"Fueron justo los 20 años que necesité para terminar el secundario, la universidad y llegar al momento y lugar exactos para formar parte de la nueva misión", señaló.
Y continuó: "Luego de Viking, la NASA se dio cuenta de que había sido un error ir a buscar vida en forma directa, ya que ni siquiera había una definición clara de lo que se entendía por vida y hacer un experimento categórico era muy difícil".
"Como el objetivo de esa primera misión era muy ambicioso, decidimos buscar elementos necesarios para la vida tal como la conocemos, como el agua. En 1997 lanzamos Pathfinder y tuvimos éxito en el aterrizaje, pero no encontramos agua", comentó.
San Martín recordó que luego de esa misión hubo otras dos que también fracasaron en 2004 y 2008, y luego llegó Curiosity, en 2012.
"Para la misión del año que viene vamos a utilizar el sistema de guiado y navegación del Curiosity y tendremos una innovación en el sistema de aterrizaje, que contará con una cámara que filmará lugares adecuados para el descenso", detalló.
El experto insistió en que "es necesario desarrollar un sistema de aterrizaje muy preciso, que tenga en cuenta mediciones de velocidad, viento y otros factores".
"El fin es recolectar muestras que puedan regresar a la Tierra y prepararnos para la futura exploración humana de Marte, que es el objetivo de horizonte para la NASA", completó.