En medio de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para blindar las reservas con al menos US$ 30 mil millones, la Argentina podría lograr esta semana el visto bueno de la OCDE para comenzar su camino para sumarse al club de “buenas prácticas” que originalmente solo agrupaba países desarrollados.
Dentro de menos de un mes, en tanto, llegará una nueva prueba: el país podría saltar de categoría en un índice global de Morgan Stanley y ascender a “mercado emergente”. MSCI, la firma del banco de inversión que tiene a su cargo el índice global, definirá el 20 de junio si la Argentina cumple con las condiciones necesarias de acceso al mercado de acciones, pese a la “volatilidad” financiera de las últimas semanas.
En su flamante rol de coordinador del equipo económico, Dujovne podrá festejar si todo sale de acuerdo con el plan oficial o deberá mostrar resistencia si las noticias son adversas.
La definición sobre si el país pasa de fronterizo a emergente será a las 17.30 hora local del 20, un día antes del nuevo vencimiento de Lebac. El resultado no está asegurado después de la corrida cambiaria del último mes, que llevó el dólar a devaluarse desde los $ 20,50 hasta un máximo de $ 25,50.
Objetivos. El salto mejoraría las condiciones de financiamiento para el país, según señalan en el mercado. Tanto en este punto como sobre la pertenencia a la OCDE o el acuerdo con el FMI, en el sector privado creen que haría más difícil tomar medidas poco market-friendly, como controles de capitales o salirse de la senda del ajuste.
Desde París, donde se anunciaría el ingreso a la OCDE esta semana, Daniel Funes de Rioja, chair del B20 (el grupo de negocios del G20), aseguró que “no hay preocupación por lo que pasó a nivel financiero, aunque sí hay una visión de que la Argentina tiene que resolver estos temas con acuerdos básicos multisectoriales”. Lo dijo después de participar del Foro Económico Internacional que se realizó en San Petersburgo, al que también asistió Christine Lagarde, la titular del FMI. “Se marca que la transición argentina no es fácil, pero se logró mostrar una conducta para salir de la turbulencia”, aseguró.
La volatilidad de las últimas semanas con la salida de capitales y la devaluación serán factores de debate también para el MSCI, aunque el ministro de Finanzas, Luis Caputo, se mostró confiado en que se logrará el “ascenso”.
“Si como consecuencia de la crisis cambiaria, el Gobierno considerara reintroducir controles de capital, podría impactar en la recalificación”, advirtió después de la corrida Sebastien Lieblich, jefe global de investigación de gestión de índices del MSCI, según Bloomberg. Esa medida llevó al país a la categoría de frontera.
Mercado. “Evaluamos la accesibilidad al mercado de acciones. Siempre que esta no se vea afectada, no hay ninguna razón para que tomemos ninguna medida”, agregó.
“Según el criterio metodológico, Argentina está completamente en la senda de ser un mercado emergente. Depende de la experiencia de los inversores, si creen que los requerimientos se cumplen y es el momento indicado. La situación general puede generar preguntas”, aclaró, de todas formas.
El MSCI está llevando adelante estas reuniones de consulta con los inversores para definirse en un mes. Allí también revisará el índice para Arabia Saudita.
