Durante la revisión se detectó la violación de los protocolos COVID establecidos para el funcionamiento de gimnasios, entre los que se constató la mala trazabilidad, ausencia de islas de sanitización, no respetar turnos de 45 minutos y no respetar los 15 minutos de desinfección entre otros incumplimientos. La detección de las infracciones determinó la clausura del local.
El mencionado gimnasio había sido visitado en seis oportunidades, en las que se advirtió sobre las cuestiones que debían resolver respecto a lo establecido en el protocolo específico que regula la actividad.