La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, volvió a marcar sus diferencias con el presidente del PRO, Mauricio Macri. La funcionaria de Javier Milei aprovechó su discurso en la cena de fin de año de Apertura Republicana para tirarle picantes dardos al expresidente y sostuvo que ahora tiene más libertades para hacer su trabajo.
“Poder llevar adelante lo que uno piensa, lo que uno cree, sin que alguien te diga ‘no pará, no tanto, no me saques tantos policías a la calle, ponelos un poquitos más lejos’. Todo no, no, no... ¡No las pelotas!”, exclamó quien ocupó el mismo cargo durante la gestión de Macri.
Esta mañana, el presidente Javier Milei se hizo eco de ese fragmento del discurso de Bullrich y felicitó a la titular de la cartera de seguridad. “¡Adoro a mi ministra! Su trabajo excelente. No sólo mejoró la calidad de vida de los argentinos de bien, sino que además es reconocido en todo el mundo (lo cual la ha llevado a exponer su trabajo en el FMI”, afirmó desde Italia, donde mantendrá un encuentro con la primera ministra de ultraderecha Giorgia Meloni y participará de un festival del partido Fratelli d’Italia.
Los elogios hacia Bullrich se dieron justo mientras Macri encabeza una cumbre del PRO para definir cómo seguirá la relación con el Gobierno y el rumbo para las elecciones de 2025, en un momento de máxima tensión tras la caída de la sesión de Ficha Limpia.
El acto del que participó ayer Bullrich fue una muestra más de la distancia que mantiene con Macri desde las elecciones presidenciales y su pase al gobierno libertario.
“Celebrando un año del comienzo del cambio”, fue el eslogan de la cena de fin de año de Apertura Republicana, uno de los espacios bullrichistas que promueve la integración política y electoral del PRO con La Libertad Avanza.
En el evento participaron el intendente de 3 de Febrero y exlarretista, Diego Valenzuela; el presidente del INCAA, Carlos Pirovano; y el director del Banco Central, Juan Curutchet.
“Yo quería dar un paso y venía alguien y me frenaba. Quería dar otro paso y me frenaban. Y ahora no me frena nadie”, exclamó Bullrich, en medio de calurosos aplausos. La ministra estaba parada al lado de un cartel con la imagen de un león abrazándose con un pato que el mandatario libertario compartió después de recibir su apoyo para el balotaje, hace más de un año.