La sentencia de Besi fue dictada a consecuencia de un pedido de juicio abreviado acordado entre la fiscala María Cecilia Martiní, el defensor oficial Martín García Ongaro y el imputado, un albañil de 27 años, apodado “Mano Negra”, quien reconoció la autoría del hecho. La víctima también dio su consentimiento.
En el expediente se probó, con las pruebas incorporadas durante la investigación fiscal preparatoria, que el 26 de febrero pasado, a las 18.50, “Nuñez agredió con un cuchillo tipo ‘daga o faca’, en la zona del pecho, a Claudio Alejandro Guevara, provocándole una herida punzo-cortante que le afectó el corazón, debiendo ser intervenido quirúrgicamente, con estado de salud crítico y riesgo de vida, y con asistencia respiratoria”. Ese episodio ocurrió en pasaje Medina, en el barrio Aeropuerto, en cercanías de las calles Ruhl y Convención Provincialista.
“La responsabilidad penal del acusado ha quedado evidenciada no solo por el reconocimiento del mismo, sino también por diversos testimonios que fueron aportados a la causa y que dieron cuenta de un altercado entre Núñez y Guevara, con las consecuencias médicas que posteriormente surgieron. En ese sentido, Emiliano Carmona habló de una pelea previa y empujones por parte de los involucrados, mientras que Andrea Guevara y Horacio Ponce vieron a Claudio Guevara ya lesionado, con sangre sobre su pecho y a Núñez retirándose del lugar del ilícito portando un cuchillo en una de sus manos”, señaló Besi en el fallo.
El magistrado unificó los cuatro años por la tentativa de homicidio con la condena que el juez de audiencia, Daniel Sáez Zamora, había dictado el 23 de marzo del año pasado –en otro abreviado– contra Nuñez. En esa oportunidad el fiscal Máximo Paulucci y el defensor particular Gastón Gómez habían convenido una pena de un mes de prisión por hurto simple, que a su vez había sido unificada con otro anterior a siete años, en una pena única a siete años de prisión.
Además el 11 de marzo de 2014, otro tribunal le había unificado a Nuñez –y revocado el beneficio de la libertad condicional– otras dos sentencias condenatorias en esos siete años de prisión. Una había sido firmada el 19 de diciembre de 2013, a cinco años de prisión por robo agravado por el uso de arma de fuego cuya aptitud para el disparo no pudo acreditarse, en cuatro oportunidades; robo simple en grado de tentativa; y resistencia a la autoridad; y la otra el 1 de noviembre de 2010, a seis meses por robo simple en grado de tentativa y robo simple, en dos oportunidades, que a su vez fue unificada con otra anterior a cuatro años y dos meses de prisión.
