Las autoridades buscan castigar duramente a quienes cometan actos de vandalismo.

En enero de 2015, un seguimiento con cámaras de seguridad en Ezeiza alimentó la atención que había por aquellos días sobre la figura del fiscal Alberto Nisman, cuando se supo que había retornado a la Argentina desde Europa para denunciar por encubrimiento del atentado a la AMIA a la entonces presidenta Cristina Kirchner.