Un grupo de científicos de la Universidad de Medicina Harbin (China) ha "realizado el primer trasplante de cabeza humana", ha anunciado este viernes en una rueda de prensa el profesor italiano Sergio Canavero, director del Grupo de Neuromodulación avanzada de Turín. Este ha agregado que "inminentemente" habrá una operación en un humano vivo, recoge el diario The Telegraph.
Valeri Spiridónov, programador ruso diagnosticado con una pérdida muscular rara debido a la enfermedad de Werdnig-Hoffman, ha sido el primer candidato para someterse a una operación única de trasplante de cabeza. Sin embargo, el primero en pasar por el trasplante será un chino ya que las autoridades del país asiático han concedido permiso a los expertos y proporcionado fondos para llevar a cabo el experimento.
Recién en diciembre de 2017 podremos ver el primer trasplante de cabeza realizado en humanos vivos. El voluntario para someterse a esta complicada operación que se alargaría durante 36 horas es Valery Spiridonov, un programador ruso de 30 años que sufre atrofia muscular espinal, una grave enfermedad genética que afecta a la movilidad.
La operación será capitaneada por el neurocientífico italiano Sergio Canavero, que ha establecido en dos años el tiempo necesario para verificar al 99% la efectividad de esta técnica. Según ha declarado Valery Spiridonov a Fox News: "No hay prisa. Sin duda, la operación se realizará cuando el doctor y los expertos estén un 99% seguros de su éxito. Tengo que hacerlo porque no tengo muchas opciones. Mi decisión es definitiva, y no pienso cambiarla"
Además del debate moral surgido en torno a esta operación, muchos científicos han mostrado también su escepticismo ante su viabilidad. La parte más crítica de este proceso surge a la hora de volver a conectar la espina dorsal y el resto de conexiones nerviosas, algo que muchos otros científicos han intentado hacer sin éxito en experimentos con animales. Por ejemplo, Robert White implantó la cabeza de un mono en el cuerpo de otro en 1970, aunque este sólo sobrevivió una semana ya que su cuerpo rechazó la nueva cabeza.