La Inspección General de Justicia (IGJ) determinó que Boca Juniors deberá informar sueldos, contratos y cantidad de socios, luego de una denuncia presentada por la oposición del club. La decisión surge tras 90 pedidos de informes que no fueron respondidos antes de la aprobación del balance.
Todo comenzó el año pasado, cuando la oposición solicitó información detallada sobre aspectos clave como contratos, sueldos y la cantidad de socios activos y adherentes. Sin embargo, el club nunca respondió, y el balance fue aprobado con los votos del oficialismo en la Asamblea de octubre.
Ante esta situación, Sergio Brignardello, representante de la minoría en la Mesa Directiva, presentó una denuncia ante la IGJ alegando que no se sabía qué se estaba votando.
Tras varios meses de análisis, el organismo falló a favor del denunciante y aplicó un apercibimiento a Boca, que si reincide en la falta de transparencia podría enfrentar sanciones más severas.
Además, el club deberá elaborar un reglamento que garantice el derecho a la información de los socios, el cual deberá ser aprobado en asamblea y puesto a disposición de la IGJ.
Entre los datos que Boca deberá informar se incluyen la cantidad de socios y su distribución entre activos y adherentes, la cantidad de empleados del club, los sueldos de los integrantes del Consejo de Fútbol en su carácter de contratados y los montos de los acuerdos publicitarios.
Ahora se espera la respuesta de Boca, que deberá acatar la resolución y brindar la información requerida. Como suele decir Juan Román Riquelme, el club es de los socios, y esta decisión apunta a que todos puedan conocer el estado real de la institución.