El presidente Michel Temer fue grabado por los dueños del mayor frigorífico el mundo, JBS Friboi, dando su aval para comprar el silencio del detenido ex diputado Eduardo Cunha, un cercano aliado y considerado el motor y cerebro del juicio político que destituyó de la jefatura del Estado a Dilma Rousseff, según la Red Globo de TV.