La Senadora Nacional Norma Durango fue una de las primeras oradoras en el recinto y dijo que “No soy economista, no hablaré de cuestiones técnicas, voy a hablar desde lo que veo todos los días, en Buenos Aires y en mi provincia, La Pampa. Por qué es necesario ponerle un freno al tarifazo? Porque las tarifas así como están ni la gente ni las PyMES las pueden pagar. El proyecto al que adherimos de razonabilidad en las tarifas de servicios públicos, declara la emergencia en materia de servicios públicos y favorece la tarifa social, propone una alternativa racional y lógica.

 

No es un congelamiento de las tarifas sino que busca retrotraerlas al ya alto nivel que tenían en noviembre de 2017 y actualizarlas al mismo ritmo que los salarios. Debemos evitar el retraso tarifario y adecuar su actualización a la capacidad  de pago de las  familias. De manera de atender las necesidades de las empresas sin abandonar a su suerte a los hogares argentinos.

 

Algo similar puede decirse con respecto a las empresas y su impacto en las economías regionales que también forman parte de nuestra preocupación como legisladores, para que los  incrementos destinados al sector de las pymes no excedan el Índice de Precios Internos al Mayor” dijo.

 

Durango analizó que “este plan económico ahoga a los sectores más castigados, sabemos que el costo de los servicios de gas y electricidad son de suprema importancia para el presupuesto de los hogares de las trabajadoras y los trabajadores, pero  también decisivos para las y los emprendedores y comerciantes.

 

Estos aumentos han trastocado todos los presupuestos y todas las previsiones, justo en este momento de mucha incertidumbre y de crisis, donde hay un dólar altísimo, una suba que cómo siempre se traslada a los precios y lo vemos en el día a día en el supermercado.

 

Todos lo comprobamos a diario y en esto las mujeres somos las que, como siempre en situaciones de crisis sufrimos más el impacto. Las compañeras deben hacer malabares para poder alcanzar un mínimo de calidad de vida para sus familias, y no caer en un deterioro de la calidad y cantidad de los alimentos de sus hijas e hijos.  Un precio elevado del kilovatio o del metro cubico de gas afecta rápido en el poder adquisitivo de las familias porque eleva el precio final de los productos y de otros servicios. Son insumos esenciales y su aumento se traduce en más y más aumento en el costo de todas las actividades económicas, la elaboración de alimentos, la calefacción, el transporte” expresó.  

 

Dijo también Durango que “el aumento desmedido se refleja en un deterioro económico social de los que menos tienen, es más exclusión y menos calidad de vida. O no escuchan a la gente en la calle?? No ven las facturas que se pagan?? No reconocen el tamaño del problema y el impacto en la economía de las y los trabajadores??

 

Los aumentos de tarifas que este gobierno viene aplicando desde el inicio de su mandato han dañado de manera severa el presupuesto de los hogares con bajos o, inclusive, medianos ingresos.

 

La lógica de estos incrementos supone que los precios de la energía crezcan más rápido que el promedio de los precios de la economía, incluido dentro de éstos al salario que, sabemos, corre siempre por detrás de la inflación. Se  le ha imprimido a estos aumentos un ritmo que resulta carente de sensibilidad hacia quienes menos tienen y de desprecio por el destino de miles de pequeñas empresas” reafirmó.

 

Y agregó “nos encontramos hoy en día con facturas que no pueden ser afrontadas por las familias, ni por las pymes. Aquello que de manera genérica se denomina “recomponer la rentabilidad de las empresas” energéticas, representa una carga abrumadora para las familias, que no terminan de reponerse de un aumento para recibir otro golpe a sus bolsillos.

 

No hay días con buenas noticias dentro del esquema de aumentos desbocados que promueve el gobierno del presidente Macri. Los aumentos son altos y no vienen solos. Deterioran el poder adquisitivo y la calidad de vida de  la población, destruyen el tejido social  descomponiendo las relaciones de los individuos en el seno particular de los hogares y en la vida en sociedad.

 

Es un verdadero atentado a la integridad de las familias: aumentos de la luz, del gas, del agua, del transporte, de los alimentos, de los combustibles, de los medicamentos, etc. Los hogares argentinos ven que lo que necesitan para sostener lo más básico es día a día más caro.

 

 

Peor aún es la situación de desempleados y de las familias que intentan resistir con la Asignación Universal por Hijo. Para un trabajador activo el impacto es entre 7,4 % y el 14,5% para los adultos mayores y quienes se encuentran en situación de pobreza.

 

La caída del poder adquisitivo viene generando una fuerte aceleración del endeudamiento de las familias para sostener sus niveles de consumo mínimos. Los créditos otorgados por la Anses a través del Programa Argenta para sectores de bajos ingresos ascendieron hasta finales del año pasado a 56.000 millones de pesos” dijo Durango.

 

 

Más adelante la Senadora pampeana expresó que “los hogares en situación desesperada asumen deudas en circuitos informales o grises que cobran intereses usurarios y que derivan prontamente en un empeoramiento de la vida familiar, dadas las exorbitantes tasas de interés que deben abonar. El gobierno se refugia en la necesidad de atender la rentabilidad de las empresas pero se desentiende de la economía doméstica, del bienestar de los hogares y de la viabilidad de las Pymes. En La Pampa Camuzzi Gas Pampeana es la distribuidora de gas natural. Esta multinacional ha aumentado el costo de las tarifas, entre diciembre de 2015  y abril de 2018 un setecientos noventa y ocho % (798%). Esta multinacional obtuvo en los últimos 12 meses una ganancia de más de cuatrocientos cincuenta y dos millones de pesos. aumentó sus ganancias casi en un 400 % desde el 2015 a la fecha.

 

Y esas ganancias no se traducen en una mejora en la prestación del servicio! No hay inversiones suficientes, la demora para nuevas conexiones es interminable, de eso podemos dar fe los pampeanos!  Para terminar señor presidente, reitero la pregunta… ustedes, el gobierno,  no andan las calles? No ven el aumento de las personas en situación de calle? Hombres, mujeres, niñas y niños, familias enteras durmiendo y viviendo en la calle!! No ven la cantidad de gente en la mendicidad, pidiendo monedas para comer!! Yo si lo veo! Voy a la verdulería y sólo se escuchan lamentos. Voy al supermercado y escucho críticas. Paso por los negocios y no hay nadie!     En mi provincia en todas las cuadras hay locales vacíos, negocios cerrados, fundidos!! Y sabe qué significa eso? desempleo, pobreza, desesperación.

 

Dijo también Durango que “una aceitera en Uriburu, una localidad pampeana, por poner un ejemplo… dejó de producir este mes porque le cortaron el suministro de energía eléctrica por falta de pago, 900 mil pesos de deuda y saben qué? Por ser el aceite de soja la base de su producción y ante  la falta de soja, que sabemos no ha sido fácil de conseguir la soja, porque los grandes productores especularon esperando  qué pasaba con el dólar, esta sumatoria hizo que no pudiera esta aceitera sostener sus gastos fijos y su personal quedó en la calle.

 

 

En la misma localidad 30 personas trabajadoras de un frigorífico en marzo también cerró ahogada por las deudas impagables, y lo mismo en Santa Rosa dónde Calzar tiene la meta de reducir de 230 a 150 los operarios. El año pasado ya hubo despidos y retiros. A comienzos de 2016 la planta de Santa Rosa tenía 420 trabajadores.

 

Otro ejemplo de esta moneda corriente que son los despidos y los cierres de fuentes de trabajo son Ragasa S.A. y Ferrobaires en General Pico; el cierre definitivo de la fábrica "Cerámicos Castex" de Eduardo Castex, una  empresa con 44 años de trayectoria, que abasteció a las obras de construcción locales y en la zona. Familias enteras en la calle sin un ingreso mínimo, eso significa.

 

Por eso decimos y sostenemos que las tarifas así no se pueden pagar, señor presidente la gente lo pide, lo suplica, son impagables las tarifas. Alguien tiene que dar una razonable respuesta a este clamor, por eso yo acompaño este proyecto de ley. Muchas gracias.