Marino advirtió que el gobierno nacional debe abandonar sus pujas internas y el espectáculo de confrontaciones si es que quiere "pedir ayuda" en sectores económicos y políticos. "Para pedir ayuda, primero tienen que ordenar la familia", redondeó Marino.

 

El exlegislador ratificó su intención de ser candidato a gobernador opositor y dejó en claro que no piensa postularse a otro cargo que no sea el de comandar el Ejecutivo pampeano.

 

Respecto del equipo que lo acompaña o la fórmula que piensa definir para competir en las elecciones del año que viene, aclaró: "Es prematuro quién me va a acompañar. Pretendo ser gobernador, tengo equipo, me he preparado y formado, pero no soy el único".

 

"Los partidos cuando integran un frente pasan a ser secundarios. No tengo compañera de fórmula, es un debate en Juntos por el Cambio. Yo soy candidato a gobernador o ayudo y colaboro como uno más, pero no es que voy como postulante a gobernador y termino como diputado", dejó establecido.

 

"La grieta no soluciona problemas"

 

En tanto, Marino analizó los cruces entre el presidente y la vice como una intención de "ser gobierno y oposición al mismo tiempo". Aunque aceptó: "Tampoco en la oposición pensamos igual, no hay homogeneidad", apuntó en declaraciones televisivas.

 

El exsenador recordó que en su momento, "cuando Argentina estuvo a punto del default, la propia oposición colaboró cuando muchos legisladores del Frente de Todos votaban en contra". Así aludió a la sanción legislativa del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que tuvo más aval de sectores de Juntos por el Cambio que del kirchnerismo.

 

Analizó en forma metafórica que si el gobierno nacional sale a "pedir ayuda, primero tiene que ordenar a la familia".

 

"Desde que tengo uso de razón hay una grieta en la Argentina. Lo que hay que preguntarse es: ¿eso soluciona los problemas de los argentinos? No. Tenemos que hacer los esfuerzos y pensar en la sociedad. Si nos tiramos piedrazos no nos damos cuenta de que en el medio está la sociedad", insistió el dirigente del radicalismo.

 

Interpretó que en el contexto actual "la inflación deteriora lo más sagrado de cualquier ser humano, que es el salario".

 

"La política es el arte de lo posible, pero es para resolver los problemas de una sociedad; y en este momento la sociedad tiene más problemas y menos soluciones", agregó.

 

"Una falla política"

 

Aceptó que "acá hubo una falla de la política, desde el '83 hay cosas que la política no ha solucionado y por eso surgen fenómenos mediáticos con soluciones mediáticas". Refirió a Javier Milei u otros dirigentes y espacios que agitan su posicionamiento a partir de la denuncia de la "casta política".

 

Aclaró que "en los frentes electorales que se constituyeron en el mundo hay experiencias muy exitosas y otras no tanto". Y consideró: "El descreimiento de la sociedad es culpa de los políticos. La política es la mejor herramienta para solucionar los problemas", reiteró.