El Gobierno nacional recibe una nueva presión por parte del kirchnerismo. Por un lado, Máximo Kirchner apuró el adelanto de aumentos al Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM). Pero, por el otro, el ala K alineada a Juan Grabois pide que se implemente un “Salario Básico Universal” (SBU). En este marco, diputados del Frente Patria Grande presentaron formalmente el proyecto de ley que podría abarcar a un universo de nueve millones de personas de todo el país.

 

Se trata del proyecto de “Ampliación del Sistema de Seguridad Social mediante el Salario Básico Universal”, presentado este martes en el Salón Delia Parodi por el diputado y economista Itai Hagman. Lo acompañaron sus pares Federico Fagioli y Natalia Zaracho, además de Leonardo Grosso, legislador del Movimiento Evita. Asimismo, en el lugar se estuvieron el citado Grabois y otros dirigentes K.

 

Qué es el SBU

 

Según la iniciativa, el SBU es una prestación monetaria mensual no contributiva y de alcance nacional destinada a trabajadores de bajos ingresos, con un monto equivalente al valor de la Canasta Básica Alimentaria de un adulto, de acuerdo a lo informado por el Indec. La iniciativa cuenta con apoyo de otros sectores K. Entre ellos, de la CTA de los Trabajadores, la Corriente Federal, la Corriente Clasista Combativa; y del diputado y exministro de Desarrollo Social Daniel Arroyo.

 

¿Dificultades para su implementación?

 

La propuesta llega en un marco de disputas en el Frente de Todos entre el kirchnerismo y el albertismo sobre la orientación económica. Mientras que el sector referenciado en Cristina Kirchner reclama mayor gasto social y redistribución del crecimiento económico, el Gobierno no quiere despegarse del programa de disciplina fiscal acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

 

Por esa razón, un proyecto ambicioso como el de un Salario Básico Universal produce resquemores en el entorno del presidente Alberto Fernández. Esto se debe a que la propuesta traería aparejado un elevado costo fiscal.

 

¿Quiénes recibirán el SBU?

 

De acuerdo a la letra del proyecto, la finalidad del SBU es “dar una respuesta a la nueva realidad laboral argentina post-pandemia a través de la ampliación de la seguridad social y la promoción del empleo”. “Será otorgado a las personas desocupadas; de la economía informal; inscriptas en la categoría A del Régimen Simplificado de Pequeños Contribuyentes y en el Régimen de Inclusión Social y Promoción del Trabajo Independiente”, especifica el proyecto.

 

Los argumentos de los legisladores

 

Al exponer en la Cámara baja, Hagman reconoció que la aplicación del SBU para nueve millones de personas requerirá “un monto significativo” del Presupuesto. Pero aclaró que “este proyecto no es inviable” ya que “se puede discutir cómo financiarlo”. Por su parte, Zaracho (quien se desempeñaba como cartonera antes de asumir en Diputados) destacó que “esta medida podría eliminar la indigencia y garantizar que todo el mundo tenga, al menos, un plato de comida cada día”.

 

En la misma sintonía se expresó Fagioli: “¿En qué momento naturalizamos tanta desigualdad? Necesitamos políticas redistributivas. Un SBU que equivalga al valor de una Canasta Básica Alimentaria no sólo nos permitiría terminar con la indigencia, sino también avanzar hacia la justicia social”, remarcó el legislador.