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El ministro de Economía negociará un acuerdo con el FMI y asegura que no habrá ajuste fiscal

El titular del palacio de Hacienda trazó en líneas generales como será su gestión en el ministerio de Economía.
 
El ministro de Economía, Martín Guzmán, dio este miércoles su primera conferencia de prensa con los principales objetivos del programa económico. Habló de las negociaciones ya iniciadas con el FMI y del fracaso del programa anterior, que los referentes del organismo internacional han reconocido. También presentó a su equipo con el que trabajará. "No vamos a realizar más ajuste fiscal en el 2020 porque eso genera más recesión", aseguró. Y recalcó que no tomarán medidas de desdoblamiento cambiario y que el cepo continuará como está planteado.
 
El joven economista agradeció al presidente Alberto Fernández la convocatoria para estar al frente del Palacio de Hacienda y adelantó que van a crear una unidad especial para la gestión de la deuda pública y una comisión asesora que estará formada por algunos ex asesores de finanzas.
 
Aseveró que "no tiene sentido recibir más desembolsos del FMI a efectos de servir la deuda" en el actual contexto macroeconómico, aunque admitió que el dinero sería bienvenido si se pudiera utilizar para "realizar inversiones públicas para aumentar la capacidad productiva y del sector transable".
 
El flamante ministro ratificó que el Gobierno dispondrá de medidas de recuperación de salarios y asignaciones jubilatorias en los próximos días, parte de las cuales serán incluidas en el proyecto de Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva.
 
También adelantó que se llevarán adelante "consultas con los acreedores para obtener una modificación en el perfil de la deuda que permita un sendero de superávits fiscales primarios y resultados comerciales consistentes".
 
Ante los periodistas, Guzmán recalcó que el principal objetivo de la actual gestión es "resolver la profunda crisis económica que enfrentamos y para eso preparamos un programa macroeconómico integral para enfrentar la crisis".
 

Los principales conceptos económicos de su discurso fueron los siguientes:

 
"Lo que se ha hecho con las jubilaciones en el Gobierno de Macri es inaceptable y la caída en términos reales ha sido brutal y eso lo queremos resolver. Cuando se envíe el proyecto de ley de Solidaridad y Reactivación Productiva al Congreso, allí se detallarán los incrementos, sobre todo a los sectores más vulnerables".
 
"Estamos viviendo en un contexto con alta incertidumbre internacional. Hay que ser más flexibles y estar preparados para enfrentar los cambios en la economía en un mundo cambiante".
 
"La visión de un programa macro es integral, existen importantes desequilibrios, con endeudamiento interno y externo, con un riesgo país por encima de los 2.000 puntos, y por supuesto, un importante déficit fiscal, con un aumento de los intereses". 
 
"Cuando un país entra en una situación de inconsistencia pasa lo que estamos viviendo. Queremos mejorar para que las familias dejen de vivir con tanto estrés".
 
"No venimos a prometer cosas rimbombantes, queremos resolver la situación de virtual default, que ha dejado la administración anterior".
 
La Argentina tiene que converger a un equilibrio fiscal pero el problema es que no se puede hacer de golpe, una profundización en este sentido incrementaría la caída de la economía".
 
"El país no tiene acceso al crédito, lo ha perdido, los mercados reconocen que la situación del país es insostenible. Lo mejor que podemos hacer es detener la contracción pero aceptando que no tenemos los recursos financieros suficientes".
 
"Queremos reducir la inflación a un dígito pero eso lleva tiempo. No se debe atacar solo con políticas monetarias sino con estrategias macroeconómicas. Hay que redefinir las prioridades y tener en el centro la cuestión social, protegiendo a los sectores más vulnerables de la sociedad".
 
"La situación del país es de extrema fragilidad".
 
"Es necesario resolver el problema de la deuda pero para eso hay que tener capacidad de pago. Tenemos que tranquilizar a la economía argentina, que los acreedores sepan que van a poder cobrar".
 
"Vamos a establecer consultas con los acreedores para reperfilar la nueva estructura de la deuda. El FMI es parte de este problema. Hay un reconocimiento del programa anterior y de la grave situación económica en la que está la Argentina".
 
"Es un programa diseñado por nosotros, no por el FMI. Hay que adecuar el acuerdo con el fondo a estos objetivos".