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Escándalo Argentina vs. Brasil: las medidas que podría tomar FIFA contra cada Selección

Mientras el organismo comunicó que recibió todas las imágenes de lo ocurrido durante el encuentro entre Brasil y Argentina del domingo pasado, su titular Gianni Infantino calificó el incidente de "locura"
 
Hasta el momento, pasados dos días del escándalo que se produjo apenas comenzado el partido por Eliminatorias entre Brasil y Argentina, no hay absolutamente nada muy claro, ni de lo que ocurrió y porqué, ni de las consecuencias que puede llegar a tener. 
 
Aunque, teniendo en cuenta los antecedentes y el poderío que tiene Brasil en el negocio del fútbol, en general, lo más posible es que salga perjudicada la Argentina de alguna forma, aunque no necesariamente perdiendo los puntos.
 
En principio, y mientras su presidente Gianni Infantino calificó ayer de "locura" el evento, la FIFA comunicó que ya recibió los "primeros informes" del encuentro, e insistió en que se tomará una decisión al respecto "en su momento", luego de analizar lo sucedido. "Esta información será analizada por los órganos disciplinarios competentes" indicaron.
 
En tanto, de acuerdo al analista internacional argentino Gustavo Segré, en Brasil se evalúan dos posibilidades, una es reanudar el partido y otra "que le saquen los puntos" al elenco nacional.
 
"En Brasil evalúan jugar el partido desde el minuto que se suspendió o que le saquen los puntos a Argentina, no mencionan a Brasil y por eso los jugadores brasileños se quedaron en la cancha", señaló.
 
En diálogo con el programa "Alguien tiene que decirlo" que conduce Eduardo Feinmann en Radio Rivadavia comentó además: "Anvisa es una agencia nacional de vigilancia sanitaria, fue fundada en enero del '99, y es clasificada como una agencia reguladora autárquica, órgano autónomo de la administración pública con personalidad jurídica, patrimonio e ingresos propios. Sin injerencia en salud".
 
Y explicó: "Hay dos datos que no salieron en Argentina. Según Anvisa hubo una reunión el sábado en el hotel con la Conmebol, la CBF de Brasil y la AFA, donde dijeron que los jugadores no podrían salir del hotel". 
 
"En el momento en que van a la cancha lo que llevaba Anvisa era la notificación para que se retiren del partido y cumplan la cuarentena y la deportación. El otro dato que no se confirmó es que la Conmebol le pidió a la AFA que los 4 jugadores vayan al vestuario. Si esto es así Brasil estaba haciendo las cosas de acuerdo a la normativa", dijo.
 
En este aspecto, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) acusó este lunes a un empleado de la AFA de falsificar las declaraciones juradas de Giovani Lo Celso, Emiliano Martínez, Emiliano Buendía y Cristian Romero.
Documentos publicados por el periodista y escritor brasileño Octavio Guedes en el portal de O Globo detallan que "todas las declaraciones fueron firmadas por una sola persona, el señor Fernando Ariel Batista de la AFA", es decir el DT del seleccionado Sub 20 y olímpico, quien negó rotundamente haber viajado con la delegación que llegó el viernes a Brasil desde Caracas, Venezuela.
 
Anvisa se puso en contacto con las autoridades sanitarias del estado de San Pablo y después con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para informar el problema. 
 
La CBF fue notificada el sábado a las 10 de la mañana y debían trasladar esa información a los responsables del partido, en este caso, la Conmebol. Según la Anvisa, la CBF le pasó la información a la Conmebol y también a la delegación del seleccionado argentino.
 
Durante la tarde del sábado, los agentes sanitarios participaron de una reunión junto a representantes de la Conmebol, la CBF y la AFA donde se orientó a los dirigentes argentinos a formalizar un pedido de excepción para los jugadores.
 
 
El pedido de Anvisa fue de "máxima urgencia" para que se pueda aprobar antes del partido pero aducen que Argentina no realizó dicho pedido.
 
Luego, la historia es conocida: las autoridades de Anvisa y efectivos de seguridad ingresaron al campo de juego y provocaron la suspensión del clásico sudamericano correspondiente a la sexta fecha de las Eliminatorias sudamericanas para Qatar 2022.
La versión de la Anvisa no pesaría en la decisión de la FIFA e incluso con el correr de las horas pierde valor ya que no coincide con las declaraciones públicas de sus autoridades.
 
Es que la Jefatura de Gabinete del Gobierno de Brasil admitió que hubo pedidos sin respuestas de excepcionalidad para los cuatro jugadores del seleccionado argentino que fueron denunciados. El organismo gubernamental aclaró que, frente a esos pedidos, "nunca hubo respuestas que pudieran estar en desacuerdo con las determinaciones sanitarias de Anvisa".
 
Casa Civil reconoció en un comunicado enviado a la cadena Globo como "posibles" las solicitudes de excepcionalidad por parte de la AFA. Sin embargo, advirtió que lo importante a efectos prácticos no fueron los pedidos en sí mismos sino las respuestas a esas solicitudes, algo que nunca ocurrió por el feriado en Brasil.
 
En las presentaciones enviadas por la AFA a la Jefatura de Gabinete se anexaron documentos con la información de que los jugadores pasaron por Inglaterra en los 14 días previos a su llegada a Brasil y también se informa que todos ellos están vacunados y tuvieron pruebas de PCR con resultado negativo.
 
Al no contestar a esas solicitudes, el Gobierno de Brasil entiende que no hubo desacuerdo con las determinaciones tomadas por Anvisa, que el domingo, una vez que había comenzado el choque ordenó cuarentena a los cuatro futbolistas y pidió que salieran del país.
 
Por su parte, el diputado del Partido Socialista Brasileño Julio Delgado aseguró que la FIFA debe "reprogramar" el clásico.
 
"La FIFA tiene que hacer que se juegue el partido, quizás en otro país, hay que buscar caminos que no perjudiquen a los seleccionados de Argentina y Brasil", afirmó Delgado en diálogo con Télam Radio.
 
Para el diputado, su país vive "un momento de mucha inestabilidad política" que tuvo incidencia en la suspensión del clásico. "La fuerza policial no dejó trabajar a la agencia sanitaria y existe una interna entre el gobierno de (Jair) Bolsonaro y la policía. Aquí estamos todos sorprendidos por lo que pasó", apuntó el dirigente político. Y agregó: "No se puede culpar a las dos delegaciones por una puja entre la fuerza policial y de salud. Lo mejor sería que la FIFA disponga otro partido".