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"La mujer debe ser dueña de su cuerpo, de su goce y de su deseo"

Carolina "Pampita" Ardohain debuta como protagonista en cine en una película con un componente de alto perfil erótico.
La modelo y celebridad Carolina "Pampita" Ardohain hace su debut en cine con un protagónico en el filme "Desearas al hombre de tu hermana", dirigido por Diego Kaplan y que se estrenará el jueves. Pampita dijo que la película "incitará" a las mujeres a "poder ser dueñas de su cuerpo, de su goce y de su deseo".
 
Además consideró esencial que el Estado continúe apoyando el desarrollo de la industria argentina del cine porque "hacer cine es carísimo, nosotros hacemos un cine de calidad, nuestro cine es valorado en Europa, en Estados Unidos y en el resto de América. Si no hay un apoyo del Estado no se podría lograr y ese talento quedaría invisible", afirmó.
 
La película basada en un libro de Erika Halvorsen, tiene una fuerte impronta femenina ya que el director Diego Kaplan decidió narrar la mirada de la mujer sobre los juegos de seducción y la sexualidad a través de las hermanas Ofelia (Ardohain) y Lucía (Mónica Antonópulos ), además de Carmen, la madre de ambas interpretada Andrea Frigerio.
 
En este filme los objetos del deseo pasan a ser los hombres. Los intépretes son el rosarino Juan Sorini y el brasileño Guilherme Winter quienes encarnan a dos seductores, caracterizados con patillas, bigotes y barba, en una película que tiene momentos de drama, comedia, una lograda estética y alta tensión sexual con ciertas escenas antológicas.
 
—¿Cuándo tuvo que ver con el proyecto? ¿Se sumó como actriz o le gustó colaborar con la producción?
 
—No, yo leí el guión y me enamoré. Me pareció hermoso lo de estas hermanas tan distintas, la época? Ya desde que lo leí me lo imaginé y lo soñé. Hice el casting para ser Lucía, empecé a ensayar siendo Lucía y en el proceso con rica, la escritora, y Diego mientras buscaban a Ofelia empezaron a descubrir que yo era Ofelia. Fue cosa de ellos, de un día para el otro me lo plantearon y estas dos hermanas me tenían tan enamoradas que fue "si no es esta soy la otra". Y me animé a este personaje que era aún más jugado que el otro en otras cosas, cada una tenía lo suyo. No era el que me había imaginado y cuando me lo propusieron fue un sí, ya me tenía tomada el guión y quería estar como fuera.
 
—¿Cómo definiría a la película?
 
—Es una película erótica, no hay sexo explícito y no hubo sexo en las grabaciones obviamente. Fuimos muy respetuosos con todas las escenas porque tenía que ver con el despertar sexual y el sentir de una mujer, entonces sabíamos que la única forma de contarlo era contarlo en esos momentos y si lo contábamos desde otro lugar perdía fuerza. Siempre fuimos muy conscientes de que iba a haber muchas escenas de sexo porque era la única forma de contar cómo siente una y cómo siente la otra, pero se tomó con un respeto y un profesionalismo absoluto. Siempre entendimos que era muy importante que sea explícito porque era la única forma de entender la conexión de una con la otra y como una goza a través de lo que siente la otra, cómo encuentra una forma de desahogar su sentimiento y su deseo a través de la otra persona. Eso las humaniza mucho a las dos, porque las dos sufren con sus características. Así como Lucía sufre mucho porque no llega nunca a sentir igual que Ofelia, Ofelia sufre porque tiene culpa y de chica ha sido tratada de apagar con su fuego interno, como se aleja de su familia para tratar de tener una vida convencional con un hombre bueno como lo que dice la sociedad que tiene que ser. Por eso es tan rico cómo se une una con la otra. Tiene momentos alegres musicales, de comedia y eso me encantó, porque esos momentos me paree que le dan un respiro al espectador. Desde la primera escena hasta la última no dejan de pasar cosas y todas son muy importantes y fuertes, entonces está bueno que tengan unos minutitos para descansar porque Diego te manda otra escena que te perturba, te conmueve, te avergüenza, te lleva al pasado o te identifica con una. Les va a pasar mucho que se les mezclen muchas emociones durante una hora y media.
 
—¿Por qué situar a estos personajes femeninos muy liberados en una época de represión y dictadura?
 
—Diego no se imaginaba esta situación en la actualidad porque hoy en día hay otras libertades y están todos con su mente más abierta a las diferencias, inclusive la mujer ha tenido más poder sobre sus decisiones y su cuerpo. En ese momento era distinto porque la sociedad era mucho más estructurada, porque todo lo mediático era estructurado, la televisión y las sociedades, se vivía a escondidas. No es que no pasaran las mismas cosas de ahora pero no se hablaba, no se sabía y se ocultaba. Entonces, encontró más interesante que todo esto ocurriera en esa época. Son tres mujeres muy fuertes, ya venimos con el mandato de nuestra madre que siempre fue muy moderna y que nos inculcó libertades insólitas para la época, pero también esas libertades nos incitaron a todas a tomar caminos muy distintos.
 
—¿Cómo se siente encarnar a mujeres que fueron liberales en una época dura?
 
—Me encantó y además me parece que incita a muchas mujeres a ser libres de sus decisiones, de su cuerpo inclusive hoy, que vivan el sentir sin culpa y poder disfrutar de gozar y hacer lo que quieran sin ataduras de la sociedad o sin mandatos de arriba. Poder ser dueñas de su cuerpo, de su goce y de su deseo.
 
—Esas escenas en las que usted aparece, ¿incrementan su condición de sex-symbol?
 
—Probablemente (risas). Puede ser, yo hace muchos años que despegué de la sex symbol pero se van a encontrar con esta mujer sensual que fui en otro momento.
 
—¿Le gusta el cine argentino? ¿Cree que sea bueno que se filmen muchas películas por año en Argentina?
 
—Me encanta, me parece que hay mucho talento. En todos los festivales siempre hay algo argentino, nos valoran mucho afuera y somos distintos. Se está filmando distinto, hay mucha calidad actoral y somos un referente de cine en todo el mundo y por eso siempre hay una película argentina en algún festival.
 
—¿Es importante que el Estado trate al cine como una industria cultural?
 
—Sí, si nos destacamos en esto y es evidente que nos valoran mucho, es porque algo deben estar haciendo bien. El apoyo es fundamental porque es carísimo y la industria en Sudamérica es mucho más chiquita para competir con los grandes tanques del resto del mundo. Si no hay un apoyo externo no se podría lograr y ese talento quedaría invisible.
 
 
 
Sujeto y objeto, según la autora
 
"La historia pone en foco a la mujer como sujeto deseante y no como objeto de deseo. Mi objetivo fue trabajar el deseo femenino a través de la historia de dos hermanas: la que se conecta y la que no se conecta con su deseo", dijo Erika Halvorsen, autora del libro. "A través de esta historia queda al descubierto una familia con sus oscuridades y a través de eso se echa luz sobre los arquetipos femeninos y la infidelidad. Lo que tratamos de cuestionar es por qué la mujer queda presa del deseo de un hombre y no se conecta con su propio deseo. Si una mujer está conectada con su propio deseo difícilmente caiga presa del deseo del otro", afirmó.